El impacto de la Inteligencia Artificial (IA) en la atención médica es innegable, y su papel se intensifica en el ámbito del diagnóstico. La capacidad de los algoritmos de aprendizaje profundo y otras técnicas de IA para analizar grandes conjuntos de datos clínicos, imágenes médicas y datos genómicos ha revolucionado la forma en que los […]

El impacto de la Inteligencia Artificial (IA) en la atención médica es innegable, y su papel se intensifica en el ámbito del diagnóstico. La capacidad de los algoritmos de aprendizaje profundo y otras técnicas de IA para analizar grandes conjuntos de datos clínicos, imágenes médicas y datos genómicos ha revolucionado la forma en que los profesionales de la salud abordan la identificación y predicción de enfermedades.

La IA permite una detección más temprana y precisa de patologías, contribuyendo así a mejorar las tasas de éxito en tratamientos y procedimientos médicos. La IA tiene el potencial de transformar el sector, pero los tomadores de decisión tienen el reto de hacer una aproximación asertiva y responsable.

Una visión de la Organización Mundial de la Salud (OMS) refuerza la perspectiva del poder de la IA en la salud: “La IA puede utilizarse para facilitar la atención clínica; reforzar la investigación en el ámbito de la salud y el desarrollo de medicamentos, y apoyar diversas intervenciones de salud pública, como la vigilancia de la morbilidad, la respuesta a los brotes y la gestión de los sistemas de salud”.

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Desde la perspectiva de la innovación, la IA no solo optimiza la precisión diagnóstica, sino que también revoluciona la gestión de la información en los sistemas de salud. La capacidad de la IA para procesar grandes volúmenes de datos administrativos agiliza los proceso e impulsa nuevas formas de diagnosticar y atender los padecimientos. 

La colaboración entre la IA y los profesionales de la salud es una pieza clave en esta revolución. La capacitación continua es esencial para garantizar que los médicos y el personal de atención médica comprendan y confíen en las herramientas de IA y propongan nuevas y mejores formas de atender a los pacientes. La implementación exitosa requiere una transición suave, donde la tecnología se integre de manera natural en la rutina diaria de los profesionales de la salud.

La innovación en el campo de la salud ya no ve a la IA como una herramienta futurista, sino como un aliado presente. En lugar de reemplazar a los profesionales de la salud, la IA complementa su experiencia, permitiéndoles tomar decisiones fundamentadas respaldadas por análisis de datos exhaustivos. Esto no solo mejora la calidad de la atención, sino que también libera tiempo para una interacción más significativa entre médicos y pacientes.

Ejemplos de esta revolución en el ámbito de la Salud 4.0 son los dispositivos como los monitores de glucosa continuos para pacientes con diabetes. Estos dispositivos están conectados a través de la nube, recopilando datos en tiempo real sobre los niveles de glucosa y enviando alertas automáticas en caso de fluctuaciones anómalas. La IA analiza estos datos para prever patrones y tendencias, permitiendo a los profesionales de la salud ajustar los planes de tratamiento de manera más personalizada y proactiva.

Otro ejemplo es el uso de la telemedicina y la IA en la detección temprana de enfermedades. Plataformas de salud digital ofrecen consultas virtuales respaldadas por algoritmos inteligentes que analizan síntomas y datos médicos del paciente. Estos algoritmos pueden ayudar a los médicos a realizar diagnósticos más rápidos y precisos, optimizando el tiempo de respuesta en situaciones críticas.

Puntualmente en el ámbito de la innovación, se han desarrollado aplicaciones móviles que utilizan la realidad virtual para proporcionar terapia a pacientes con trastornos de ansiedad o fobias. La inteligencia artificial personaliza la experiencia terapéutica según las respuestas y progresos del paciente, ofreciendo un enfoque más efectivo y cómodo.

El diagnóstico asistido por IA no se limita a la interpretación de imágenes médicas. También abarca la identificación temprana de patrones en datos clínicos, lo que puede prever la progresión de enfermedades y permitir intervenciones preventivas. Esto no solo es beneficioso para los pacientes, sino que también reduce los costos asociados con tratamientos más prolongados y complejos.

La revolución de la IA en la salud desde la perspectiva de un innovador no solo se trata de adoptar nuevas tecnologías, sino de transformar fundamentalmente la forma en que entendemos y ofrecemos atención médica. El diagnóstico asistido por IA es solo el comienzo; la sinergia entre la tecnología y la experiencia humana está allanando el camino para un futuro donde la salud personalizada y eficiente es la norma.

“Desde la perspectiva de la innovación, la IA no solo optimiza la precisión diagnóstica, sino que también revoluciona la gestión de la información en los sistemas de salud. La capacidad de la IA para procesar grandes volúmenes de datos administrativos agiliza los proceso e impulsa nuevas formas de dieagnosticar y atender los padecimientos”

Por Leonardo Solís Garmendia, eempresario, conferencista y articulista en temas de transformación digital, datos e inteligencia artificial. Fundador y director general de Mobiik.

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