Ante el deterioro medioambiental, el ex mandatario brasileño, Fernando Henrique Cardoso, hace un llamado a unir esfuerzos para preservar el equilibrio ecológico en el mundo.
Por Miguel Cruz
Desde el 2020 el planeta ha experimentado, además de la pandemia, pobreza en distintas regiones, la cual ha traído como consecuencia un impacto económico.
Asimismo, ha tenido lugar la llegada de Joe Biden a la presidencia de Estados Unidos, los enfrentamientos en el Sahara Occidental, el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, entre otros. El mundo está en un proceso de transformación.
A este escenario se suma el cambio climático, cuyas secuelas se observan en el aumento continuo del nivel del mar, el cual se aceleró a partir de 2013 y alcanzó un máximo en 2021, así como su acidificación y calentamiento, de acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial.
Según la CEPAL, “es la variación global del clima de la Tierra debido a causas naturales, pero principalmente a la acción humana”, entre las que se incluyen el detrimento de la biodiversidad y quema de combustibles fósiles, por la contención del calor solar en la atmósfera.
En esta materia, el expresidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, en entrevista para “Trailblazer Latinoamericanos” de Salesforce, afirmó que “hoy se sabe que se tiene la posibilidad del agotamiento de los recursos naturales, que no se reproducen. No es que no debamos utilizarlos, sino saber gestionarlos”.
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El exjefe de Estado, cuyas raíces se remontan a la Amazonía brasileña, resaltó la importancia del medioambiente al hacer hincapié en la conservación del equilibrio que debe existir entre todos los ecosistemas, seres vivos, artificiales y la mano del hombre para garantizar las condiciones de vida.
Con el objetivo de preservar dicho balance, el líder latinoamericano afirmó que es importante “la preparación para que las personas se abran, para que capten lo que hay de nuevo en el mundo y cooperar con esa novedad”.
Creyente de que la educación brinda un panorama más amplio de la realidad para evitar los estragos del desequilibrio ambiental, Henrique Cardoso comentó que “todos formamos una red, y podemos tomar conocimiento de lo que acontece en el planeta”.
En este sentido, se forma una dupla fuerte entre la educación y el liderazgo colaborativo en asuntos de cambio climático, ya que con acciones hacia una misma dirección es que se conseguirá un mejor cuidado del medioambiente, para revertir o paliar, en la medida de lo posible, la devastación en todos los hábitats.
A la pregunta que Alejandro Anderlic, Director de Asuntos de Gobierno para Latinoamérica y Políticas Públicas de Salesforce, formuló respecto a la intervención de la tecnología en asuntos de materia ambiental, el ex Presidente dijo que “las nuevas generaciones son más abiertas a ésta, y el futuro va a ser tecnológico quiera uno o no. Entonces es mejor que tratemos de aprender un poco más de la tecnología moderna”.
“No podemos echar toda la culpa a los políticos de lo que nos pasa. Muchas veces nos miramos demasiado a nosotros mismos, y para crear un liderazgo colaborativo que nos permita salir adelante en temas como el ambiental, es necesario que gobierno, empresas, sociedad civil, academia, sindicatos y todos los stakeholders trabajen de la mano para llevar a cabo acciones contundentes que beneficien a la sociedad y al planeta”, añadió Alejandro Anderlic.
Ignorar el cambio climático podría tener un impacto de dimensiones desconocidas para la humanidad. Tan sólo en materia económica, la previsión es que al mundo le cueste 1.7 billones de dólares, cada año, hacia la década de 2050, aumentando a 30 billones de dólares —equivalente a 30 veces la economía de México— al año, para 2075, según estimaciones del Foro Económico Mundial.
La idea del expresidente Cardoso se fundamenta en la conciencia “de que hay límites en la naturaleza, ya que ésta puede agotarse. Entonces hay que saber manejarla”. Por eso la iluminación LED, los paneles solares y vehículos eléctricos son alternativas tecnológicas que colaborarían a un menor deterioro ambiental.
Para que esto suceda, se requiere la intervención del hombre, específicamente a través de las empresas, no sólo por los beneficios económicos y de productividad que podrían tener, sino por la responsabilidad asumida hacia la búsqueda del progreso y, al mismo tiempo, evolucionar hacia una sociedad más sostenible.
*El autor es especialista en sustentabilidad en América Latina.
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes República Dominicana.