La creación de una “ventanilla única” será la clave para agilizar los trámites de permisología para desarrollar proyectos de energías renovables.

Los principales actores del sector electricidad dominicano han acordado reducir la burocracia y el tiempo que conlleva reunir los permisos requeridos para poner en operación proyectos de generación de energía renovable en el país, a través de la creación de una “ventanilla única” en la que se podrán resolver todos los requisitos para obtener una concesión del Estado.

Hasta ahora, se toma hasta cinco años para que un proyecto de energía solar o viento, principalmente, entre al sistema, desde que es presentado a las autoridades para lograr su primera aprobación. 

“Eso nos resta competitividad porque en muchos de los países a donde van los inversionistas de República Dominicana el tiempo anda cerca de los dos años y eso tiene un impacto importante en cuanto a atracción de inversión o que quienes ya tienen presencia en el país quieran invertir más”, opina Manuel Cabral, vicepresidente ejecutivo de la Asociación Dominicana de la Industria Eléctrica.

La decisión de facilitar la generación de energías renovables forma parte de una serie de medidas consensuadas en el Pacto Nacional para la Reforma del Sector Eléctrico. Ese acuerdo, que estuvo más de cinco años en discusión, surge con el objetivo de construir en conjunto, sector público y el privado, la estrategia para desarrollar el sistema eléctrico dominicano, para que el país pueda contar con un servicio competitivo y sostenible.

Cabral destaca que por primera vez se está trabajando en un plan integral, el cual servirá al sector para identificar cuáles son las necesidades y las metas del país en materia de producción y distribución de energía. El Ministerio de Energía y Minas es el encargado de liderar los trabajos para que se cumpla con lo acordado en el pacto.

“Esa diversificación planificada, coordinada, es la que va a permitir que nuestro sistema de generación siga por donde tiene que ir, que si analizamos la trayectoria de los últimos 20 años notamos cómo hemos pasado de generar 90% de derivado de petróleo en principio, y a finales de diciembre pasado ya estaba en un 5%”, indica Cabral.

El 14.69 % de la producción de energía del país caribeño provino el año pasado de fuentes renovables (agua, sol, viento y biomasa), lo cual representó un incrementó de casi tres puntos porcentuales en comparación con el 2019. Ese aumento fue impulsado principalmente por la generación de hidroeléctricas, según registra el Organismo Coordinador (OC) del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI).

El vicepresidente ejecutivo de la ADIE considera que es importante dar prioridad a proyectos de energías limpias, pero nunca dejar de lado la generación a base derivados del petróleo, ya que representan un complemento importante. En los últimos tres años, el país ha intensificado cambios a gas natural que operaban a base de combustible. 

La meta del Estado es que para 2030, el 25% de la energía que se genere provenga de fuentes limpias. En ese sentido, La hoja de ruta (REmap) de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) destaca que la República Dominicana tiene potencial para aumentar la cuota de generación de energías renovables hasta un 44% en 2030, si se basa esencialmente la solar , eólica y bioenergía.