Si padeces de los molestos puntos negros, te presentamos una serie de tips que te ayudará a deshacerte de elllos y a limpiar los poros de tu cara.

Lo que debes saber sobre el ayuno intermitente

Estos hábitos aceleran el envejecimiento

Seguro alguna vez en tu vida lidiaste con los molestos puntos negros que son resultado de poros abiertos. Para limpiarlos te presentamos una serie de tips infalibles.

Qué son los poros

Todos tenemos poros en la cara, se trata de aberturas de las glándulas pilosebáceas cuya función consiste en segregar grasa para mantener la humedad, además de que se transforma en una barrera protectora natural de nuestra piel.

El problema es cuando el sebo que producen es demasiado y éste al entrar en contacto con el oxígeno forman los molestos puntos negros, en especial en la zona T del rostro que comprende la frente, nariz y barbilla. La regla es muy simple: cuando más sebo se produzca, mayor será el tamaño de los poros.

¿Qué hacer para cerrar los poros?

Cerrar lo poros en su totalidad es imposible, ya que son parte de nuestra anatomía, sin embargo, hay manera de evitar que aumenten su tamaño y que con ello se acumule grasa dando paso a los molestos puntos negros. Para ello solo sigue estos tips:

Vaporizaciones

Se trata de un tratamiento muy sencillo. Pon a hervir agua y cuando esté en su punto de ebullición retira de la estufa, pasa el agua a un recipiente y pon la cara cerca del vapor que emana el agua caliente y cubre tu cabeza con una toalla, a modo de que encierre el vapor.

Lo ideal es no acercar mucho el rostro, solo lo suficiente para que el vapor entre en contacto con la piel de tu rostro y esperar por cinco minutos.

Una vez pasado ese tiempo coloca un paño frío sobre tu cara, esto ayudará a que los poros disminuyan su tamaño y evitará que la suciedad se vuelva a meter en ellos.

Recuerda no irte a los extremos entre lo caliente y lo frío ya que puedes dañar tu piel.

Limpieza rostro
Foto: cookie_studio/Freepick

Exfoliación

Dependiendo tu tipo de piel puedes exfoliar tu cara una o dos veces a la semana. Lo ideal es que lo hagas después de la ducha, cuando el vapor ya abrió los poros de tu rostro ya que así eliminará la suciedad que se encuentra dentro de ellos.

Usa un cepillo

Para el momento de lavar tu cara lo mejor es que te ayudes con un cepillo para el rostro. Sus cerdas suelen ser suaves y harán un efecto de masaje en tu piel, eliminando las impurezas de tus poros.

Exfolilación
Foto: engin akyurt/Unsplash

Lava tu cara por la mañana y por la noche

No importa el horario en que tomes una ducha, lo mejor que puedes hacer para evitar tener poros abiertos es seguir una rutina de cuidado que empieza por lavar tu piel antes de salir de casa y por la noche, así eliminarás la suciedad que pudiste acumular mientras dormías y la que se juntó durante el día.

Ojo, recuerda siempre eliminar el maquillaje antes de ir a la cama.

Mascarillas

Existen en el mercado diversas mascarillas que te ayudan a disminuir el tamaño de los poros de tu cara, pero te recomendamos optar por aquellas hechas con arcilla ya que este elemento ayuda en la absorción de la grasa y extrae la suciedad de los poros dilatados o congestionados.

Rostro
Foto: Ron Lach/Pexels

Elige una crema o serum para piel grasosa

De nada servirán los consejos anteriores si no tienes una crema que te ayuda a controlar la grasa. Los serums suelen ser los mejores aliados a la hora de humectar la piel de la cara ya que no tapan los poros como una crema común.

Crema cara
Foto: Sora Shimazaki/Pexels

Si sigues estos consejos podrás notar cambios en poco tiempo, pero lo mejor que puedes hacer es acudir con un dermatólogo que te dirá qué tipo de piel tienes y qué tratamientos puedes seguir para disminuir el tamaño tus poros y eliminar para siempre los puntos negros.