América Latina y el Caribe (ALC) tiene múltiples oportunidades y ventajas para impulsar la economía verde, que consiste en un modelo económico con menor impacto ambiental. En su más reciente informe titulado El Potencial de la Integración: Oportunidades en una Economía Global Cambiante el Banco Mundial señala que la región tiene un enorme potencial, tanto […]

América Latina y el Caribe (ALC) tiene múltiples oportunidades y ventajas para impulsar la economía verde, que consiste en un modelo económico con menor impacto ambiental.

En su más reciente informe titulado El Potencial de la Integración: Oportunidades en una Economía Global Cambiante el Banco Mundial señala que la región tiene un enorme potencial, tanto en las áreas tradicionales como en los nuevos ámbitos que surgen en esta industria.

Una de las oportunidades en la economía verde es que su matriz eléctrica se basa mayormente en la hidroelectricidad, lo que la hace poseedora de la red eléctricas más verde del mundo.

Esto significa que ante cualquier exportación intensiva en energía tiene la región tiene la posibilidad de comandar un sobreprecio verde, permitiendo la expansión hacia nuevos mercados y evitando los aranceles rectificados por carbono en las fronteras, señala el informe.

Otra gran oportunidad para ALC en la economía verde es su amplio potencial en términos de energías renovables no convencionales, entre las que se incluyen la energía geotérmica, eólica, solar, mareomotriz, undimotriz, biomasa y pequeñas centrales hidroeléctricas.

“Esta abundancia de energía verde y confiable puede ser una ventaja comparativa importante en la producción de nuevos vectores energéticos —como el hidrógeno verde y los combustibles sintéticos— y de otros productos en la cadena de producción, como amoníaco y otros fertilizantes y químicos verdes”, explica el documento publicado este mes por el organismo.

Otro gran potencial de la región se encuentra en sus enormes reservas de litio —que se concentra principalmente en Argentina, Bolivia y Chile— y su dominio de la producción de cobre, dos metales claves para las nuevas tecnologías de descarbonización y electrificación.

Por último, ALC cuenta con algunas de las mayores dotaciones de capital natural del mundo. Esta región posee más de un cuarto de la superficie forestada del mundo, uno de los niveles más altos de recursos de agua dulce renovable y alrededor de la mitad de la biodiversidad del mundo.

Las oportunidades para la región en la economía verde están ahí, el desafío sigue siendo el de movilizar inversiones y conocimientos para aprovechar estas oportunidades y construir economías diversificadas y dinámicas, concluye el informe en un acápite dedicado a este tema.