Solo el pasaje a Filipinas tiene un costo de unos 2,500 dólares y un hotel cuesta alrededor de 400 dólares la noche.
El día previo a la celebración de Independencia dominicana, el pasado 26 de febrero, la selección nacional de baloncesto obtuvo la victoria más importante de su historia, al derrotar 79-75 al equipo de Argentina, en condición de visitante, en la ciudad de Mar de Plata, del país sudamericano.
Esa hazaña representó la conquista del boleto para participar en la Copa del Mundo de Baloncesto FIBA 2023 que se celebrará en Filipinas, Japón e Indonesia del 25 de agosto al 10 de septiembre de este año.
“Tuvimos que ganarle a Argentina, el campeón de América, subcampeón mundial y cuarto del mundo, con su equipo completo”, resaltó el presidente de la Federación Dominicana de Baloncesto (Fedombal), Rafael Uribe, al hablar para Forbes, sobre la relevancia del triunfo conquistado por los quisqueyanos.
Para dicho encuentro el conjunto dominicano llegó a suelo argentino con la única opción de lograr el triunfo para conseguir avanzar al cuarto Mundial de su historia y tercero consecutivo en este deporte, contando con su asistencia en las ediciones de Filipinas 1978, España 2014 y China 2019.

“Realmente no es una simple victoria, es un cambio de mentalidad, del pensamiento de todos los que amamos el baloncesto de la República Dominicana, de que estamos en la capacidad de poder enfrentar a equipos de este nivel en área de América y sin temor a equivocarme, de Europa”, señaló Uribe.
El presidente de Fedombal explicó que el nuevo sistema de clasificación de la Federación Internacional de Baloncesto (Fiba) para América, tuvo una duración de dos años, en el que el seleccionado dominicano participó en un calendario de seis ventanas o fechas de dos partidos, disputando 12 juegos, seis de ellos como dueños de casa y los restantes como visitantes.
“Este proceso de ventanas es una cosa insólita, hubo equipos que ganaron ocho partidos de 12 y quedaron fuera del Mundial, como Argentina, eso nos hubiese podido pasar a nosotros… tener un buen desempeño y quedar fuera”.
En este proceso de competencia la República Dominicana (9-3) logró avanzar al Mundial por el Grupo de América, junto a Canadá (11-1), Estados Unidos (9-3), Venezuela (8-4), Puerto Rico (8-4), México (8-4) y Brasil (8-4).
Uribe señala que este sistema de competencia tiene sus aspectos positivos y negativos, y uno de los más exigentes es la inversión que hay que realizar para tener una representación competitiva en cada una de las ventanas.
“En Europa es fácil, lo que son las ventanas, ya que los equipos se van en un tren o en un avión, que cuesta entre 30 o 60 euros, pero cuando vas de República Dominicana a Panamá el ticket aéreo supera los 1000 dólares”, especifica el titular de Fedombal.
Explica que hay ventanas que solo la compra de boletos de viaje implica reunir unos 80,000 dólares. Puso como ejemplo el caso de Ángel Luis Delgado, a quien hubo que trasladar desde Estambul hasta la República Dominicana. Pero, luego de llegar al país, debía agotar un itinerario que incluía viajes a Panamá, Argentina, República Dominicana y otra vez Turquía.
“A un jugador de ese nivel, en una ventana tan crucial como la última que jugamos, te dice que quiere jugar ¿cómo le dices que se quede?”, sostiene Uribe.
Para la Fedombal preparar cada una de las ventanas tuvo un costo promedio de 150,000 dólares, que a una tasa de 54.82 pesos dominicanos por dólar se traduce en una inversión de 8,223,000 pesos por ventana, por lo que el proceso completo de la participación dominicana en este sistema de clasificación precisó de una inversión de 49 millones, 338 mil pesos (49,338,000).

“El año pasado tuvimos ventanas en febrero, en junio, en septiembre y en noviembre, y este año en febrero” recordó el federado dominicano.
Cambios oportunos
Un refrán popular expresa que “no se cambia de caballo a mitad del río”, pero el de República Dominicana fue uno de los equipos que recurrió a la sustitución del dirigente Melvyn López, por el estratega argentino Néstor "Che" García.
“Fue un cambio con números positivos en el seleccionado nacional, pero como todo en la vida, requiere muchas veces de hacer algunas transformaciones por el bien de la selección”, explicó al respecto Uribe.
García tomó el lugar de López, quien dejó el equipo con balance de 5-3, luego de que fuera separado de la selección de Argentina, a la que hasta ese momento había comandado a marca de 6-2.
“Las cosas se dieron, él estuvo al frente de la selección de Argentina, lo licenciaron y ahí vino el acercamiento”, recordó Uribe, quien afirmó que la llegada del experimentado técnico argentino fue vital para conseguir la clasificación al Mundial.
“Ante el encuentro con Argentina estaba desmoralizado, todos nosotros, y Che solo decía que traigan a todo el mundo, no importa, que traigan hasta Scola y Ginobilli, mantuvo esa esperanza y nos demostró que podemos enfrentarnos a quien sea, es un asunto de corazón, actitud y eso nos inyectó García”, sentenció Uribe.
El presidente de Fedombal dijo que uno de los aspectos que favoreció el registro perfecto de García en los cuatro juegos que dirigió la escuadra dominicana fue la recepción que encontró en los jugadores, debido en gran manera a su anterior experiencia en el seleccionado nacional, el cual tuvo bajo sus riendas en el pasado Mundial de esta disciplina celebrado en China en 2019, en el cual consiguió victorias ante Jordania y Alemania.
David contra Goliat
En la Copa del Mundo de Baloncesto FIBA 2023 competirán 32 naciones, en su mayoría potencias que cuentan con mayores recursos y facilidades que la media isla del Caribe, que a pesar de ello no se desanima.
“Somos de las carteras más pequeñas, pero con el corazón más grande”, afirmó a Uribe a Forbes, al señalar el reto que tiene por delante en la preparación de todo lo relativo a la selección que representará a la República Dominicana en el evento que tiene como sede a las ciudades de Filipinas, Japón e Indonesia.
La travesía mundialista del equipo dominicano podría superar los 800,000 dólares en presupuesto, que en pesos dominicanos la cifra podría rondar los 44 millones.

“Esto no se para y hay que buscar recursos. Para el Mundial tendremos una concentración de más de un mes, la cual comenzará el 15 de julio y el Mundial termina el 10 de septiembre, eso quiere decir que son dos meses entre la preparación previa y la participación en el torneo, cuando todos los jugadores que deben agruparse están fuera del país, diseminados en diversas partes del mundo”.
Uribe especificó que el pasaje a Filipinas tiene un costo de unos 2,500 dólares y un hotel cuesta alrededor de 400 dólares la noche.
“Entendemos que en pasajes debemos gastar 300,000 dólares, porque en una concentración no puedes llevar a 12 jugadores, tendrás a 15 o 16 por lo menos. Además, debemos comprar todos los pasajes de la delegación, en la cual están integrados médicos, preparadores físicos, delegados, director administrativo y encargado de redes sociales. Un grupo que asciende a unas 26 personas”.
El presidente de Fedombal destacó que en cada uno de estos viajes también deben pagar entre cuatro a cinco mil dólares de sobrepeso, debido a que el equipo debe viajar con su camilla, con las franelas de práctica, los uniformes, entre otros elementos que son parte del equipamiento del conjunto.
Otro de los factores a tomar en cuenta en la elaboración del presupuesto es que la Fedombal tiene que gestionar el visado de cada uno de los miembros de la delegación que viajará al continente asiático.
Uribe fue enfático al señalar que en este tipo de viaje no se trata de turismo deportivo, “ahí no hay descanso, es entrenamiento en la mañana, juego en la tarde, video, no existe descanso para nada, solo se trata de estar enfocado y dedicado a la preparación y participación de la selección nacional”.
El impacto de los jugadores NBA
Aunque el veterano Jugador de los Celtics de Boston en la NBA, Al Horford, confirmó que no asistirá al evento, la República Dominicana espera poder contar con las demás estelares dominicanos quienes accionan en el baloncesto estadounidense como: Karl Towns (Timberwolves de Minnesota), Chris Duarte (Pacers de Indiana), Justin Minaya (Portland Trail Blazers) y Lester Quiñones (Warriors de Golden State).
La incorporación de estos jugadores, indudablemente, eleva el nivel de calidad del equipo quisqueyano de cara a este compromiso, pero como lo afirma Uribe, “tienes que pagar por ello”.
Con el solo con agregar a Towns, la plantilla dominicana contaría con jugador que en su carrera en la NBA promedia 23.1 puntos y 11.2 rebotes y que en la próxima campaña proyecta devengar un salario de poco más de 36 millones de dólares.

Ante esta situación Uribe reconoció que la incorporación de los jugadores NBA al conjunto dominicano produciría un incremento en el presupuesto destinado a la participación del seleccionado en el Mundial de Baloncesto, el cual aún no está cuantificado, debido a los requerimientos que suelen tener sus franquicias en la liga estadounidense y los mismos jugadores.
Uribe recordó la manera en la que los Pacers de Indiana supervisaron la participación de Chris Duarte con el equipo dominicano en una de las ventanas celebradas el pasado año.
“Cuando vino Chris Duarte ahí había dos personas que mandaron los Pacers de Indiana, que se encargaban de supervisar todo lo relacionado con él, estaban ahí en los juegos y entrenamientos, en el hotel estaban al pendiente de donde dormía o qué comía”, reveló Uribe, quien dijo que el jugador de ese nivel normalmente va a exigir lo que como profesional requiere.
“Uno trata de tener un presupuesto ajustado a la realidad, pero para tener un equipo profesional hay que invertir. Es un dolor de cabeza agradable”, reconoció Uribe.
El presidente de Fedombal señaló que cada país debe cubrir sus gatos y que Federación Internacional de Baloncesto Asociado (Fiba) solo garantiza la participación en el evento, así como también especificó que de los países de América que avanzaron al torneo mundialista, el de Quisqueya es el que menos recurso maneja, por lo cual su logró es aún más meritorio.
“Si evaluamos en América, de los siete clasificados, México cuenta con grandes recursos; Venezuela siempre se va desde temprano, se van a durar dos meses en preparación a España; Estados Unido, Canadá y Brasil, ni hablar, son potenciales mundiales y Puerto Rico invierte muchísimo dinero”, analiza el federado dominicano.
Una selección rica en talento
La decisión de quienes estarán en uniforme con el equipo estará en las manos del dirigente García, así lo especificó Uribe a Forbes, al mismo tiempo que resaltó la gran cantidad de talento de la que dispondrá para escoger.
“Tenemos un grupo de más de 30 jugadores para ser selección”, afirma Uribe, quien resaltó que esta disponibilidad de talento se debe al programa de desarrollo y reclutamiento que ha realizado la Federación.
“En el país hemos desarrollado muchos jugadores que pueden ser miembros de la selección y los que hemos reclutado en la diáspora los traemos temprano también. Es una cosecha de más de 10 años, porque nosotros apostamos a lo formativo” detalla Uribe.
El principal dirigente del baloncesto dominicano destaca que a través del plan de captación y desarrollo formativo a lo interno del país han logrado colocar en el seleccionado nacional a jugadores como Jean Montero, Andrés Feliz, Jonathan Araujo, entre otros.
En cuanto a esta labor en el extranjero, donde residen dominicanos, han sumado a jugadores como Towns, Minaya y Quiñones, que hoy muestran su talento en la NBA.
“Todos esos muchachos los hemos podido captar antes de cumplir los 16 años para que puedan jugar como dominicanos”.
No hay rivales fáciles frente a una meta olímpica
Tras el sorteo que definió las llaves en las que competirán las 32 naciones que asistirán al Mundial, la República Dominicana quedó como parte del Grupo A, junto a Angola (41), Filipinas e Italia.
Aunque en el ranking mundial de este deporte la República Dominicana (23) está mejor posicionada que Angola (33) y Filipinas (40), Uribe es consciente que no serán rivales fáciles de superar.
“No hay grupos fáciles en un Mundial, tenemos un reto por delante, porque el partido inaugural es República Dominicana y Filipinas, esa arena coge 70 mil personas, tenemos a Italia que es el número 10 del mundo y a Angola, que es el campeón de África por más de 10 años, que ha asistido a más de cinco Juegos Olímpicos y que es un equipo competitivo, atlético y con varios jugadores de la NBA”.
Uribe reiteró lo sucedido en el pasado Mundial, en el que la selección dominicana era vista como una presa fácil para la de Alemania y terminó “colándole el café” y no pasó la primera ronda.
Aun con lo difícil de la competencia el hambre de baloncesto dominicano es insaciable y en Filipinas la meta a perseguir es clara.
“Hay que ir juego a juego, pero la meta es poder clasificar a los Juegos Olímpicos”, exclamó Uribe.
Por Hanly Ramírez