La construcción del primer destino turístico de alto impacto en la región sur de República Dominicana ya está en marcha, en la provincia Pedernales.
Por Felivia Mejía
La promesa del desarrollo turístico de la región sur empieza a cumplirse con el inicio de los trabajos para crear al nuevo destino Cabo Rojo-Pedernales, enfocado en la sostenibilidad ambiental y sociocultural de esa localidad.
Este mes de marzo el gobierno inicia la construcción de carreteras, acueductos y conexiones eléctricas que darán paso al levantamiento de los hoteles y complejos turísticos que contiene el master plan de desarrollo de la provincia sureña.
Pedernales se encuentra a 310 kilómetros al sur de Santo Domingo y a 500 kilómetros de la región este del país, que es donde se concentran los grandes proyectos turísticos, como el complejo Punta Cana, que representa el principal referente de la media isla para vacacionistas a nivel internacional.
Se trata de una de las provincias fronterizas con Haití más deprimidas económicamente de la República Dominicana, pero rica en recursos naturales, ya que el 68% su territorio está declarado como área protegida, destacándose que esa zona está considerada “Reserva de la biosfera” por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
El “Plan de desarrollo turístico Cabo Rojo-Pedernales” está bajo la coordinación de la Dirección General de Alianzas Público Privada (DGAPP), que lidera su ejecución a través de un fideicomiso.
“Cabo Rojo-Pedernales, será el primer destino turístico del Caribe desarrollado desde cero bajo alianza público-privada, con una oferta de lujo fundamentada en un turismo sostenible, cuidando cada detalle para ofrecer al turista una experiencia ecológica y de aventura”, afirma el director ejecutivo de la DGAPP, Sigmund Freund.
El funcionario explica que el destino se planificó en base a la conservación del medioambiente, por lo cual las infraestructuras hoteleras se están retirando a 200 metros de la playa, cuando la norma es que sean 60 metros.
“El elemento diferenciador de esta obra es que tiene playas enclavadas en un parque nacional, es un destino virgen y el hecho de que es el primer destino turístico de la región sur que va a impactar”, indica Freund.
El funcionario destaca que el desarrollo de Cabo Rojo incluirá la construcción de hoteles de lujo y ecológicos, con capacidad de generación energética sostenible, además de la construcción de viviendas económicas para los empleados de la zona y del proyecto.
Consta de cuatro fases en 10 años promedio de implementación con una inversión estimada en US$2,245 millones para 12,000 habitaciones.
Para principios del próximo agosto tienen contemplado que se inicie la construcción del primer hotel, con el objetivo de que esté en operación para finales de 2024, afirma Freund.
Ocho hoteles de las cadenas Hilton, Marriott, Sunwing, AmResorts, Iberostar Group y Karisma Hotels & Resort se pretenden levantar en una primera fase.
“Hemos recibido la visita de grupos españoles, mexicanos y de Qatar interesados en el proyecto”, afirma el funcionario. Además de potenciales inversionistas extranjeros, las cuatro Administradoras de Fondos de Pensiones que operan en el país están interesadas en participar.
Freund agrega que están explorando la posibilidad de habilitar un puerto de cruceros en Cabo Rojo, con miras a que esté en operación a finales de 2023 y sea parte de la diversificación de la oferta turística de la zona.